San Alberto Magno fue un fraile dominico, maestro de santo Tomás de Aquino. Su figura es importante, pues ejemplifica la santificación de la inteligencia. Precisamente fue este motivo el que lo condujo a la enseñanza y a la reflexión filosófica y teológica.
Mauricio Beuchot, uno de los grandes filósofos mexicanos actuales, presenta en esta obra el pensamiento de este singular filósofo y teólogo medieval, rescatando temas como la filosofía del lenguaje, la metafísica, la lógica, la ontología y la reflexión sobre la estética.
"La lectura de san Alberto deja dos impresiones encontradas. Por un lado, asombra la cantidad de conocimientos que domina, la profundidad que alcanza en algunos sectores del saber; por otro lado, cautiva la gracia, el tono familiar con el que sabe expresar la doctrina, el ambiente de espiritualidad que se nota aun en sus obras puramente científicas. Bien mirados, ambos aspectos se equilibran".