Se encontrará en la obra distintas ópticas utilizadas por los científicos sociales. Los economistas elaboran hipótesis por la razón evidente de que el mundo enfocado desde un punto de vista económico es demasiado complejo para que se pueda entender sin una cierta abstracción. El economista para responder usaría y aislaría, mediante hipótesis simplificadoras, esto es, aunar los criterios de la Economía y el Derecho; el conflicto entre la búsqueda de la eficiencia y la equidad. El análisis económico se utiliza para intentar explicar el sistema jurídico, y también la posibilidad de sugerir cambios que podrían mejorarlo. Para cada cuestión jurídica analizada bajo este criterio se podrá determinar qué norma o qué política legislativa lograría mejorar determinados objetivos con la perspectiva de la eficiencia. Es decir, orientar el sistema jurídico a imperativos de eficiencia en normas y políticas. Por eso es que se ha divido esta obra en tres partes, la primera: conceptos económicos, y las otras dos: conceptos aplicados. El lector encontrará así primero los conceptos económicos, de conocimiento necesario, para luego abordar los temas específicos de economía aplicada al derecho. Este trabajo busca emplear la teoría económica y otras herramientas modernas, con la finalidad de justificar el empleo de esta regla en el campo ambiental y societario.