Las interacciones de estudiantes que poseen diferentes o similares niveles de conocimientos, mediados por la intervención docente, son una rica fuente de construcción o ampliación de conceptos. Las autoras sostienen que estas diferencias deben potenciarse y preservarse porque contribuyen al crecimiento de todos y todas. Así, las interacciones en un aula heterogénea son una herramienta indiscutible a la hora de pensar la gestión de la clase, como también al momento de diseñar una propuesta didáctica integral.